¡Hola Cosmos! ¿Cómo están?

    Tengo que contarles sobre este libro porque, a ver... cuando los leí no pasó ni una semana que ya sentía que los extrañaba muchísimo. 

    Como quizás sabrán, esta saga realmente se convirtió en una de mis favoritas. Todos sus libros son muy muy divertidos y super frescos además de que eenganchan de nada y tienen un estilo incréiblemente fácil de leer y seguir. 

    Todo comenzó con Leo, luego pasamos por Escorpio y tras Géminis, llegamos a Piscis. Si hacemos un balance de la saga, Leo es indudablemente mi favorito, increíblemente precioso y lo atesoro muchísimo, pero con Piscis tenés una eterna sensación de estar releyendo Leo de una manera mucho mejor estructurada y que sobrepasa tus expectativas.

    No pensé jamás que un libro de los signos podría destronar a Leo pero con Piscis estas bastante cerca (acá yo no me animo a decir que lo prefiero antes que a Leo, es que los amo demasiado, cómo elegir?!)

    Esta es la historia de Zane, un joven que trabaja freelance ilustrando los cómics de otra persona. Zane se encuentra de repente sin un hogar, porque sus roonmates son un horror y tiene que estar a la noche con una caja y sus cositas caminando bajo el sentimiento de que en poco menos de un mes va a ser deportado a Nueva Zelanda si antes no se casa. Porque sí, el casamiento es la única solución que tiene Zane y, para peor, él no quiere un matrimonio por conveniencia. Él quiere amor, el amor romántico de las novelas, de las películas, el que te pinta todo de rosa. 

    Por otro lado, tenemos a Beckett, el salvador eternamente paciente y milagroso de Zane. Con una capacidad increíble de soportar sus arranques. Porque ZANE TIENE CADA ARRANQUE. De verdad, gente sale con cualquier cosa, es un tiro al aire además de que necesitas urgente contener la intensidad que maneja porque Zane va de cero a cien en menos de un segundo y además te arrastra con él.

    La verdad al inicio me chocó un poco su personalidad, es bastante abrumadora y consume mucha energía, pero al mismo tiempo Zane es un ser tan maravilloso, iluso y gracioso que es imposible no perdonarle las indiscreciones que ponen pálido a Beckett y lo hacen replantearse su vida y cómo llegó al momento de conocerlo.

        Este es un libro que lleva más allá del infinito la relación platónica de amistad, es un viaje bellísimo y super cómico que además está teñido con temas bastante importantes como lo canalla que es el ex de Beckett. De verdad, que no le perdono NADA. Ese tipo es malo por deporte, tengo un conflicto serio con la falta de justificaciones que tiene en la vida para terminar siendo tan cruel sin ningún tipo de necesidad, absolutamente fuera de lugar y mala-gente. No hay con qué darle.

    Pero, en contraposición tenemos a Zane que no hace más que preocuparse por los otros y quitarse mérito así que ahí Beckett va a equilibrar un poco la balanza y encontrar algo de paz en su alma que bien destruida va.

    En resumen: Piscics pesca a Tauro es un viaje de ida, una montaña rusa que te lleva a hacerle un altar a Beckett para que te comparta un poco de su terna paciencia y adorar a Zane por el ingenio y la creatividad que tiene en esa mente.

    Realmente espero que si no le dieron aún una oportunidad a esta saga lo hagan porque es simplemente fabulosa. Es ideal para leerla en verano de un tirón y quedarte con ganas de mucho más.